Licuadoras

Mira, te voy a contar una historia (seré breve, lo prometo).

Desde hace unos cuantos años los zumos y batidos verdes se han convertido en un hábito en mi día a día.

Como podrás imaginar, eso se traduce en que he probado muchísimas licuadoras y batidoras. De esta forma, puedo escribir comparativas y análisis rigurosos de la mayoría de los modelos del mercado.

Me he convertido (sin quererlo) en una experta en el tema.

¿En qué te beneficia a ti todo esto? Pues si no tienes mucha idea sobre el tema y te estás iniciando en el mundo de los zumos o batidos, creo que te interesa (y mucho).

Sigue leyendo…

Antes de comprar una licuadora, fíjate en lo siguiente:

consejos para comprar una licuadora

Si tienes intención de “soltar la guita” en una licuadora nueva, esto que te voy a contar a continuación tienes que leértelo sí o sí.

Son unos buenos consejos que, en su momento, a mí me hubieran ahorrado cientos de euros (no sabes la cantidad de mierda que se vende por ahí).

Licuadora por centrifugado o prensado en frío, ¿cuál escoger? Ventajas y desventajas de cada una

Actualmente, te vas a encontrar con dos tipos de licuadoras: por centrifugado (la convencional que seguro conoces) o el extractor de prensado en frío o por masticación.

Aunque un poco más abajo tengo una comparativa muy completa hablando sobre ambos tipos (que debes leer sí o sí), te voy a resumir los puntos positivos y negativos que cada uno.

Licuadora por centrifugado

licuadora por centrifugado

Ventajas:

  • Normalmente, su precio es inferior que una licuadora de prensado en frío.
  • Son las licuadoras más rápidas: exprimen la fruta y verdura rápidamente, por lo que son ideales si no tienes mucho tiempo.
  • No necesitas cortar los alimentos en trozos muy pequeños, ya que el orificio de entrada es grande.

Desventajas:

  • Trabajan a altas velocidades, por lo que la temperatura del zumo aumenta y se oxida antes. Además, debido a esto se pierden nutrientes y enzimas.
  • Son ruidosas.
  • Para obtener la misma cantidad de zumo, necesitarás más frutas y vegetales que con el extractor por masticación.

Extractor de prensado en frío (cold press juicer) o por masticación

extractor de prensado en frío

Ventajas:

  • La extracción del zumo es más lenta que con el otro tipo de licuadora y, debido a esto, la temperatura del zumo no aumenta, por lo que se conservan todos los nutrientes y vitaminas.
  • Extraerás una mayor cantidad de zumo que con una licuadora por centrifugado. Además, la pulpa sale mucho más seca.
  • Son licuadoras muy silenciosas.
  • Podrás preparar más recetas (bebidas vegetales, cremas de frutos secos, etc).

Desventajas:

  • Su precio suele ser más elevado (aunque ahora hay modelos muy económicos).
  • Al operar a bajas revoluciones (es más lento exprimiendo) y al tener un orificio de entrada más pequeño, necesitarás más tiempo para preparar tus recetas.
  • Sus dimensiones son más elevadas, por lo que debes valorar si dispones de suficiente espacio en tu cocina.

Limpieza

Después de ver los aspectos positivos y negativos de cada tipo de licuadora (espero que ya hayas decidido el más adecuado para ti), otra característica que debes valorar es la facilidad de limpieza.

En serio, escoge una licuadora que no sea un engorro limpiar, sino acabará en la mesa de la cocina cogiendo polvo. Y, si las piezas son aptas para el lavavajillas, pues mucho mejor.

Calidad – precio

Este error lo cometí cuando empecé en el apasionante mundo de los zumos y batidos. Al principio sólo me fijaba en el precio. Debido a esto, los materiales eran muy endebles y, en definitiva, una auténtica porquería.

Con el tiempo, decidí invertir en modelos de licuadoras que, aunque su precio sea más elevado, me aseguro una buena durabilidad y calidad de los materiales utilizados (sobre todo plásticos libres de tóxicos).

Para finalizar…

Según mi experiencia, yo suelo recomendar a mis lectores los extractores de prensado en frío, ya que la calidad del zumo es superior que con una licuadora convencional.

zumos con licuadora
En esta imagen, puedes ver el zumo al poco tiempo de exprimirlo con una licuadora convencional o con un extractor de prensado en frío.

A día de hoy, no necesitas gastar un dineral para tener un buen extractor. Obviamente, tienes modelos (como la Biochef Atlas, por ejemplo) que son una auténtica pasada, pero requieren de una fuerte inversión.

Actualmente, yo utilizo el extractor de Cecotec y, de momento, no me puedo quejar, ya que su precio es inferior a la mayoría de los extractores del mercado y cumple perfectamente su función.

Espero que te hayan sido útiles estos consejos y, si te has quedado con ganas,  justo debajo podrás encontrar todas mis comparativas y análisis, donde me extiendo mucho más.